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El sofá es uno de los muebles que más se puede ensuciar, sobre todo, si convivimos con niños o animales. Restos de comida, pelos, huellas y todo tipo de manchas pueden ensuciarlo e incluso reducir su vida útil. Muchas veces no es suficiente con limpiarlo, sino que es necesario desinfectarlo en profundidad para eliminar de raíz las bacterias y los malos olores. A continuación, te explicamos cómo desinfectar un sofá paso a paso.
Primero, elimina todos aquellos elementos como pelos o migas que hayan podido quedar entre los cojines y pliegues. Saca los cojines que puedas y pasa el aspirador por toda la estructura del sofá y por cada cojín. Si dispones de cabezal específico para tapicerías en tu aspirador, úsalo. Si ves que después ha quedado algún pelo o pelusa, puedes pasar el rodillo quitapelusas o un cepillo capaz de arrastrarlos.
Lava las fundas del sofá en la lavadora utilizando un programa adecuado al tipo de tejido y siguiendo estos consejos:
Aplica un producto apto para desinfectar la tapicería del sofá tal y como se recomienda en sus instrucciones de uso. Algunos se pulverizan sobre el sofá, como es el caso de Sanytol spray desinfectante tejidos y hogar, que desinfecta el tejido y además elimina los malos olores del ambiente o Sanytol elimina olores textil, que además neutraliza alérgenos como los ácaros. Si hay alguna mancha, puedes usar Sanytol quitamanchas desinfectante previamente diluido con agua y aplicándolo con un trapo húmedo sobre la zona de la mancha con movimientos circulares y suaves. Dejarlo actuar unos minutos y aclarar bien. En tejidos delicados, antes de usarlo pruébalo en una pequeña zona para comprobar su compatibilidad.
Espera a que se seque bien al aire antes de volver a usarlo de nuevo. Asimismo, deja que las fundas que has lavado se sequen en un lugar bien ventilado, evitando que quede olor a humedad.
Una vez tengas desinfectados y secos todos los elementos del sofá, recolócalo y vuelve a poner las fundas y cojines en su sitio.
Se recomienda realizar esta limpieza y desinfección en profundidad con regularidad, además de limpiar las manchas que haya en cuanto las veamos. De esta forma, podrás mantener tu sofá en buen estado por más tiempo y evitar que los malos olores se anclen y se vuelvan persistentes.